Aunque no siempre es posible, y por desgracia es la mayoría de las veces, en ocasiones la pendiente del desagüe de la bañera nos permite instalar el nuevo plato de ducha a nivel del suelo, por lo que evitamos tener un escalón de 3 cm, que es lo habitual.
De esta manera conseguimos una accesibilidad total a la zona de ducha, ya que si además instalamos una mampara sin perfil inferior, prácticamente no tenemos que levantar el pie para entrar a la ducha.
En esta obra instalamos un plato de ducha de carga mineral en color blanco y con una textura que imita la pizarra, lo que aporta calidez y un tacto agradable al pisar sobre ellos. Estos platos son muy limpios y no resbalan con un uso normal.
Para el revestimiento de la pared se ha elegido un azulejo con los tonos muy similares al existente, por lo que no se aprecia ninguna ruptura visual entre ambos revestimientos.
También colocamos una mampara de cristal templado transparente, con una parte fija y una puerta corredera, por lo que conseguimos mucha luz en la zona de ducha y una sensación de amplitud mayor que con la antigua bañera.
! Y todo en menos de 24 horas !!!